martes, 3 de enero de 2017

TRAIL TURDETANIA 2016

El 23 de octubre me enfrentaba a otro nuevo reto, 55km en 9 horas, los kilómetros no me suponían un problema, el problema me lo suponía el tiempo en el que debía hacerlo y el desnivel, 1734m de desnivel acumulado, donde yo voy reculando

Foto: Perfil de la prueba
Venía de hacer el día 1 de octubre la pretoriana por tercer año consecutivo y con una calor infernal con lo cual ya venía entrenada de sobra. Para la pretoriana habíamos entrenado aguantar corriendo los máximos kilómetros posibles pero a la turdetana además de eso había que sumarle el desnivel que tenía la prueba, mi punto flojo los desniveles (aunque los prefiero) y el tiempo en el que debía hacerla, teníamos un punto de corte en el kilómetro 35, había que llegar antes de las 14:00. No las llevaba todas conmigo, estaba un poco intranquila y desconfiada de donde me había metido, creo que es lo normal cuando te enfrentas a lo desconocido, iba un poco a ciegas.
Para la turdetana iba con Isabel (la tita Isa), mi compañera y fiel amiga de entrenos y pruebas, nada más que le tengo que decir.....mira la prueba que he visto y allí que nos apuntamos, Manolo venía con nosotras, y que haríamos sin el Manolillo??? cuanto apoyo y ayuda en las pruebas que no hace.
Dormimos en un pueblo al lado de Guillena (Sevilla) que era de donde salía la prueba, el día antes fuimos a por nuestros dorsales y a pistear y preguntar un poco como estaba el tema,
Foto: Recogida de dorsales
De primeras el tiempo se presentaba fatal, lluvia, lluvia y lluvia todo el día, la verdad es que no me lo pensaba mucho, cosa que antes si que el tiempo me influía bastante en mi estado de animo y de como afrontaría la prueba, en esta ocasión sabía que nos iba a caer el diluvio universal, yo me llevé mi chubasquero, una funda para que no se me mojara el móvil que nos dio la organización (buen detalle) y palante, creo que mal gastarme mentalmente pensando en el tiempo que va a hacer no sirve de nada y esto creo que con el tiempo y a base de hacer pruebas y verte a 40 grados sin un misero arbol o verte con una ventisca y lluvia azotándote en la cara o pasando un frío infernal, lo que es el tiempo deja de preocuparte excesivamente porque lo que este de venir va a venir y te va a pillar con lo cual.....
La salida era del polideportivo de Guillena a las 8:00 de la mañana,
Foto: Salida en el polideportivo
Estaba lloviendo a cantaros aunque a la hora de la salida aflojó un poquito, la salida aunque eran las 8:00 de la mañana era de noche todavía, no había amanecido, salimos con 20 minutos de retraso, nos colocamos con Jose, otro compañero de la legión V de Mérida otro "loco" como nosotras, (Porque hace falta estar loco con la que estaba cayendo de plantarte en el cajón de salida) nos colocamos muy delante, creo que a sido la vez que mas delante me he colocado en la salida, empezaron a sonar cohetes, arropada por todos los corredores, ese momento en el que la única impaciente no soy yo, nervios y ganas de escuchar el pistoletazo de salida, mirando hacía arriba en la oscuridad llena de colores que dejaban los cohetes, nos caía el agua de la lluvia en la cara, que salida más bonita, y si, estamos "locos" pero lo bonito de esa salida era la lluvia, estaba impaciente pero sabía que iba a disfrutar, tenía muchas ganas de empezar a correr, yo soy muy impaciente y ansiosa y quería saber ya donde me había metido.
Suena el pistoletazo de salida y salimos que nos las pelamos aunque tranquilos, sabemos que todavía nos quedan muchos kilómetros, nos mantuvimos los tres juntos, ya nos habían avisado que los primeros kilómetros eran con bastante barro y poco después de dejar el pueblo empezamos a encontrar barro, ya correr era imposible, era mejor ir andando lo más rápido que pudieses y olvidarte de correr y que pegases el guarrazo del siglo o te rompieses algo, resbalaba muchísimo, te quedabas la zapatilla incrustada en el barro, ya había amanecido y algunos tramos podíamos esquivarlos por el lateral o por donde podías, y los tramos que no podías, yo decidí como en Ronda ir por los charcos que por lo menos no resbalan aunque era muy pronto para llevar los pies mojados pero prefería eso que caerme, llevaba los palos, benditos palos, yo creo que tengo que hacerles en mi casa algún altar y exhibirlos como si fueran un monumento porque me han ayudado tanto cuando mi cuerpo ya no respondía y me han salvado de cada porrazo....... que "pa q".
El barro nos acompañó unos kilómetros, y una vez que lo pasamos ya empezamos a correr y ahí fué cuando Jose me dijo......Marlén, ahora empieza la carrera, y no volví a verlo.....jejeje.
Foto: En el camino
Empezamos a subir, paso ligero, no podíamos perder tiempo, era mi obsesión aunque íbamos muy acompañadas, con lo cual al ir rodeada piensas que vas bien de tiempo, yo estaba disfrutando como una niña pequeña, para nada esperaba que la prueba fuese a pasar por sitios tan chulos y tan bonitos, caminos llenos de vegetación en los laterales, barro que seguíamos encontrando, no con el mismo espesor que al principio pero seguíamos teniendo barro, llovía, era una lluvia finita pero llovía bastante, un hombre que llevábamos delante recuerdo que no dejaba de resoplar y quejarse de como estaba el camino y como estaba todo y un ciclista de los de la organización solo dijo una cosa.....Disfrutarla. Yo la estaba disfrutando, y la estaba disfrutando mucho, empapada, de barro hasta las trancas, corriendo y andando cuando no podíamos correr y con unos paisajes...... es que me sorprendió tanto esta prueba, no pensaba que al ser en la zona de Sevilla y a finales de octubre..... de donde salía tanta vegetación y de donde salían esos montes??? Pasamos por zonas llenas de pinos en las que la caída de las varillas esas que dejan los pinos habían hecho el camino rojizo, zonas de bosque, zonas en las que pasabas de estar en una explanada grande a un bosque con tantos arboles y tantas hojas en sus copas que tapaban la claridad del día y estabas con una oscuridad como si de repente hubiese caído la noche. Como disfruté de todo.
Ya pregunté a la organización y no me proporcionaban nada sin gluten, pues nada, a cuestas con todo. Manolo estaba en uno de los avituallamientos junto con Silvia y una sobrina suya (familiares de Jose)decidimos quitarnos los chubasqueros, eso no traspira y al final entre el sudor y empapada de la lluvia iba super incomoda, creo que lo mejor es no llevar chubasquero por lo menos con la temperatura que teníamos ese día que no hacía mucho frío, cuanta menos ropa mejor, así te vas secando los ratos que no llueve y los que llueve pues te mojas y ya esta.
Íbamos con un paso bastante ligero y corriendo mucho, al ir rodeadas siempre tienes la sensación de que vas bien de tiempo, en un rato de silencio empiezo a echar cuentas para mis adentros, ( a ver..... nos quedan tantos kilómetros para el corte......nos queda tanto tiempo.....joder.....no puede ser, yo estoy echando las cuentas mal, repito.....nos quedan tantos kilómetros......nos queda tanto tiempo....mmmm creo que tengo que hablar con la " Tita Isa")
- Tu estas echando cuentas de los kilómetros que nos quedan para el corte y el tiempo que nos queda??
- A ver.......nos quedan tantos kilómetros.......nos queda tanto tiempo....... Madre mía no llegamos!!!!! Ay que correr mucho más!!!!
Pues ala....... a correr se a dicho, odio ir mal de tiempo, si vas mal de tiempo ya dejas de disfrutar como deberías y solo tienes un objetivo, pasar el corte. Llovía a ratos, te daba tiempo a secarte y volverte a mojar, secarte y volverte a mojar, ya no hay paradas, ni avituallamientos ni nada ya no hay casi ni conversaciones solo avanzar y avanzar a un paso muy ligero para poder llegar al corte, íbamos muy bien a un ritmo muy ligero pero claro volvíamos a echar cuentas y decíamos......a ver, si el corte lo pasamos a la hora límite que son las 14:00 en el kilómetro 35 y después tenemos 3 horas para hacer 20 kilómetros más, conclusión.....tenemos que llegar al corte mucho antes de las 14:00 porque sino no llegamos a meta en tiempo o llegamos muy muy justas siempre que no tengamos ningún imprevisto ni nada en el camino a si que tenemos que llegar con tiempo de sobra al corte. A correr!!!!!
Foto: Momento reflexión
Y por fin a las 13:00 llegamos al corte, necesitaba comer algo, saque un sándwich de mi super mochila todo mojadito no era muy apetecible pero me lo comí tenía que reponerme del desgaste que habíamos hecho, tampoco nos podíamos relajar, cuanto más tiempo llevemos a favor mejor por si en algún momento tenemos algún imprevisto a si que estiré y fuí terminando el sándwich por el camino, ala, como nueva para hacer los 20kilómetros restantes, teníamos tiempo pero no nos podíamos relajar tampoco.
Pasamos por sitios impresionantes de bonitos, una pena que fuésemos tan pilladas de tiempo y no haber podido sacar más fotitos de los paisajes, bajamos unas laderas preciosas llenas de vegetación, pero como puede ser si hace tres semanas solamente hice la pretoriana a unos pocos kilómetros de aquí y hacía una calor tan infernal que el campo estaba sequísimo. Pues no, este paisaje era veeerde verde y la ruta tenía una diversidad paisajistica preciosa.

Me note un poco bajilla, a si que pensé que era hora de tomar un gel, avisé a Isabel ya que necesitaba por lo menos bajar el ritmo un poco hasta que el gel hiciera efecto y me diera el subidón otra vez, unos minutos y ...... como una moto otra vez.
Un chico nos acompaño unos kilómetros fuimos hablando y parece que los kilómetros se pasan antes pero nos llovía, llovía lo que no estaba escrito, empapados, no íbamos mojados no, íbamos empapados, como si te metes en una piscina y te sales, empapados y corriendo, empece a quedarme un poco fría, me dolía el pecho de llevar la camiseta tanto tiempo mojada y seguir corriendo, las gotas se te quedaban en las pestañas, la cara me la iba secando parecía que si te secabas la cara la sensación era diferente, jamas me había llovido de esa manera encima.
Los últimos kilómetros, necesito parar en el ultimo avituallamiento porque tengo una china en el pié que ya la tengo incrustada de tal manera que es como si la llevase tatuada pero no quieres parar, solo avanzar y avanzar pero tenía que quitarme eso, los calcetines rotos y empapados, me los quité para quitarme la china y me los volví a colocar.......buuuaaaa que sensación mas asquerosa, cuando el calcetín va puesto, pues......está ahí puesto y ya esta pero tenertelo que quitar y volverte a colocar el mismo, empapado, roto y lleno de barro.......
Sigue lloviendo pero ya es como si tal cosa, vamos tan mojados que nos da igual y los últimos kilómetros pues......ni te digo.

Foto: Que yo fuese así era normal pero que Isabel fuese así, esto merecía una foto, ( No se como lo hace pero siempre va impecable)
 Llegamos al pueblo, por fin, que agitación, que carrera para poder llegar pero llegamos y por supuesto empezamos a correr, cuando sabes que llegas a la meta tienes que dar de ti lo que te queda y correr y entrar con la sonrisa más grande que tengas por que ya has terminado porque cuando llevas unas cuantas no le das importancia pero te has llevado por delante 55 kilometracos y te a caído la del pulpo, porque has tenido mil sensaciones en tu cuerpo, porque te a dado tiempo de pensar mil cosas, porque duele, porque correr duele, te duelen las piernas, te duele la espalda, los pies pero si, cuando ya llevas unas cuantas carreras de larga distancia estos dolores no los sientes, forman parte de tu locura, y convertir esos dolores en una gran sonrisa porque ya has terminado.
Foto: Llegada al polideportivo
 A lo lejos escuchábamos gritos de ánimos, el Manolillo y Silvia estaban esperándonos a la entrada del polideportivo, que alegría da ver a los tuyos cuando juegas fuera de casa, los pasamos, los pasamos con un grito de alegría, y cuando voy a entrar por la puerta la alegría más grande que pude tener en todo el día y que no me esperaba para nada. Allí estaban ellos, habían hecho el viaje desde Mérida a Sevilla solo para este momento, para recibirme, para verme cruzar el arco de meta..........creo que no hacen falta más palabras, para mi todo el esfuerzo realizado si al final esta es mi recompensa, merece la pena.......



Foto: Tener esto cuando terminas es de un valor incalculable
Mi aprendizaje en esta prueba fue, no tirar nunca la toalla, cuando empece a echar cuentas sinceramente llegó un momento en el que pensé para mi, que no llegaríamos al corte, jamas me retiraría pero estaba casi convencida de que no llegaríamos y me siento orgullosa, orgullosa de que en lugar de tirar la toalla (que en este caso era lo más fácil) porque íbamos mal de tiempo y nos llovía a cantaros luchamos y luchamos como dos jabatas y corrimos empapadas y de barro hasta las cejas pero corrimos porque en nuestra cabeza solo cabía una posibilidad......llegar.
Foto: FIN